La semana pasada os introduje tres preguntas esenciales. La primera ¿quién soy yo? ha ocupado la mente y las reflexiones de todos los filósofos, sabios y místicos desde el comienzo de los tiempos.

El yoga y el ayurveda explican de manera muy bella que la vida sucede simultáneamente en tres niveles de existencia. Somos muchas cosas a la vez porque vivimos de manera multidimensional en diferentes planos, interdependientes e inseparables. Esto no podemos probarlo o medirlo empíricamente pero sabemos que es así. Para sentirnos plenos necesitamos crear comunicación entre todas las partes. Estas son las bases sobre las cuales se fundamentan la antigua ciencia de la vida, el ayurveda y su disciplina hermana, el yoga.

1. en el plano físico somos un cuerpo hecho de los mismos elementos que existen en el entorno natural. El espacio, aire, fuego, agua y tierra son la materia prima que crea nuestras células y todo lo que existe en el nivel material. Cuando nuestros cuerpos se mueren, los elementos que lo crean vuelven a fundirse con la Naturaleza.

2. en el plano sutil somos una mente que organiza las impresiones recibidas a través de los sentidos. Lo que vivimos a cada momento es filtrado y ¬†clasificado para que el ego lo haga suyo. Aquí se albergan los pensamientos, los sistemas de creencias, las emociones y los sentimientos.

3. en el plano causal vamos más allá del cuerpo y la mente. Es el ámbito del alma, el campo de consciencia que causa la existencia tanto de lo sutil como de lo físico. Nuestra alma está más allá de la mente y esto hace que sea muy difícil hablar de ella. Debemos ser muy humildes para adentrarnos en este campo de potencialidad pura, infinita y eterna.

El ayurveda y el yoga nos guían en la unificación de los tres planos de realidad.¬†En el diálogo así establecido encontramos la vida.

Yo soy cuerpo, mente y alma

Yo soy Luz, Sabiduría y Amor

Satchidananda.

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